En nuestro país cada vez se divorcian más y más parejas y la prueba de ello la encontramos en que en 2021 hubo 86.851 divorcios en España, un 12,5% más que en el año anterior, según el INE. Esto se traduce en que al menos durante el confinamiento y los meses más duros de la pandemia hubo muchas relaciones que tocaron a su fin. Quizá por desgaste, quizá por inestabilidad, pero lo cierto es que el número de divorcios aumentó considerablemente.
Es por ello por lo que muchos de nosotros, llegados a este punto, nos preguntamos cómo iniciar un divorcio y lo cierto es que, una vez tomada la decisión de poner fin al matrimonio, ¿qué es lo primero que hay que hacer antes de divorciarse? Pues lo cierto es que, sin lugar a dudas, el elemento principal que va a condicionar todos los trámites de divorcio será si existe o no acuerdo entre los cónyuges. En este sentido, las diferencias en términos de complejidad de trámites y coste económico son muy notable. Por tanto, siempre que sea posible, debería optarse por el divorcio amistoso. En cualquier caso, es muy recomendable que siempre se cuente con asesoramiento legal para prevenir errores de tramitación que puedan alargar el proceso.
Además, como queremos explicaros bien las situaciones que se pueden dar, a continuación, os contamos los principales trámites de divorcio en cada una de las dos modalidades que os hemos planteado:
- Trámites del divorcio de mutuo acuerdo. Para iniciar un divorcio de mutuo acuerdo, el elemento más importante será la negociación entre los cónyuges de un acuerdo o convenio regulador que, según el artículo 90 del Código Civil, recoja aspectos como los siguientes:
- Pensiones de alimentos.
- Pensión compensatoria.
- Custodia y régimen de visitas de los hijos.
- Utilización de la vivienda familiar.
Una vez que exista acuerdo sobre estos puntos, podrá llevarse a cabo la tramitación del divorcio amistoso, que puede realizarse judicialmente o ante notario.
- Trámites del divorcio amistoso ante notario. El divorcio ante notario solo puede aplicarse si la pareja no tiene hijos menores de edad. En este caso, y siempre que hayan transcurrido al menos tres meses desde el matrimonio, la tramitación es muy sencilla. De hecho, basta con que ambos cónyuges acudan a un notario para otorgar escritura pública donde se recoja la voluntad de disolver el matrimonio, así como el contenido del convenio regulador que se haya pactado previamente. Para este trámite es necesario que estén asistidas ambas partes por un abogado que los pueda asesorar en todo momento. Así, si vosotros estáis en esta situación y no tenéis un abogado de confianza, nosotros os recomendamos que recurráis a los servicios del Bufete Albanés & Asociados Abogados, puesto que ellos son expertos en este tipo de materias y os pueden asesorar perfectamente, así como ayudaros a obtener una separación justa o beneficiosa para vosotros.
- Trámites del divorcio amistoso judicial. El divorcio de mutuo acuerdo por vía judicial no supone una tramitación compleja ni especialmente costosa. De hecho, basta con presentar una demanda de divorcio acompañada del convenio regulador y ratificarla en el juzgado correspondiente. No obstante, el juez revisará el convenio para verificar que no contiene medidas perjudiciales para los hijos ni daña particularmente a uno de los cónyuges. Como en el caso anterior, ambas partes deben contar con asesoramiento de abogado y, además, estar representados por un procurador.
- Trámites del divorcio contencioso. La tramitación del divorcio contencioso es mucho más compleja y cara que si existe acuerdo. De este modo, los pasos para iniciar un divorcio contencioso son los siguientes:
- Presentación de la demanda de divorcio por parte de uno de los cónyuges.
- Contestación de la demanda por el otro cónyuge.
- Celebración de la vista ante el juez, asistidos por abogado y procurador.
- Finalmente, el juez dictará la sentencia de divorcio, donde se recogerán las medidas que regularán la relación de los cónyuges en lo sucesivo, de similar modo a lo que indicábamos para el convenio amistoso.
Diferencia entre separación y divorcio
Os queremos hacer hincapié en estos dos términos porque es muy habitual que los confundamos en nuestro día a día. Así y en este sentido, podemos decir que la principal diferencia entre separación y divorcio es que el divorcio supone la disolución del matrimonio, mientras que en la separación sigue vigente. No obstante, no debe confundirse la separación legal con un simple cese de la convivencia, que no tendría ningún efecto frente a terceros. Es por ello por lo que es muy importante que no confundamos estos dos términos ya que, en caso de hacerlo, podríamos encontrarnos con diferentes problemas legales con el paso del tiempo.